La legionelosis es una enfermedad bacteriana de origen ambiental que suele presentar dos formas clínicas diferenciadas: la infección pulmonar o Enfermedad del legionario, que se caracteriza por neumonía con fiebre alta y la forma no neumónica conocida como Fiebre de Pontiac que se manifiesta como un síndrome febril agudo y de pronóstico leve.

Existe un protocolo de medidas, con el fin de evitar la aparición de estos focos de infección. FISA, lleva a cabo una serie de medidas preventivas, basadas en dos principios fundamentales, que son:

1º Eliminar o reducir las zonas sucias mediante un buen mantenimiento de las instalaciones,
2º Evitar las condiciones que favorecen la supervivencia y multiplicación de legionela, mediante el control de la temperatura del agua y la desinfección continua de la misma.

En FISA abogamos por la aplicación de un control preventivo, que garantice el buen estado de las instalaciones así como del agua, evitando la aparición de microorganismos bacterianos y su multiplicación. 

FISA realiza tratamientos en todas aquellas instalaciones susceptibles de convertirse en focos para la propagación de la enfermedad, que son todos aquellos que utilicen agua en su funcionamiento, produzcan aerosoles y estén ubicadas en el interior o exterior de edificios de uso colectivo o industrial:

• Sistemas de agua caliente sanitaria.
• Sistemas de agua fría de consumo humano.
• Torres de refrigeración.
• Condensadores evaporativos y equipos de enfriamiento evaporativo.
• Equipos de terapia respiratoria.
• Humidificadores y humectadores.
• Conductos de aire acondicionado.
• Piscinas climatizadas con movimiento.
• Instalaciones termales.
• Fuentes ornamentales.
• Sistemas de riego por aspersión.
• Sistemas de agua contra incendios.
• Elementos de refrigeración por aerosolización, al aire libre.
• Otros aparatos que acumulen agua y puedan producir aerosoles.

FISA le garantiza una desinfección acorde con el protocolo de limpieza y desinfección y criterios higiénico-sanitarios para la prevención y el control de la legionelosis que establece el Real Decreto 909/2001.